EDICION ES
RESUCITA LOTO
ISBN: 978-84-939600-0-1
Tamaño: 16,5 x 10,5 cm. Páginas: 79
Año: 2011
Precio: 13 € IVA incluido
Usted que tiene en sus manos esta obra ha de saber que está apunto de entrar en un mundo que la costumbre ha olvidado. En estas páginas se funden ideas y horizontes para hacer de su lectura algo positivo. Nada más tocarlas se ha pretendido que se sienta un tacto especial y un algo más, porque incluso tienen su propio perfume.
Al leer el texto se penetra en un mundo particular que se enfrenta al pesimismo de los instalados. Su autor lo hace con el aroma de una voluntad que, a modo de ejercicio cotidiano, en silencio espera las esenciales maneras de la naturaleza, que todo lo renueva.
Y más allá de lo que el autor quiera, lo cierto es que nos encontramos con una pieza extraña. No es fácil de leer. Para algunas personas puede resultar delirante, para otras alejada completamente de su imaginario personal y, por eso mismo, incomprensible. Pero para cualquiera, que palpe el argumento con todos sus sentidos, será una experiencia distinta.
Como todo lo que viene haciendo desde hace mucho tiempo Ginés Liébana. Esta pieza forma parte de la obra y del autor. Encaja en un camino. Si se remontan los pasos se encuentra una trayectoria consistente y coherente.
Ginés ha sido un interprete permanente de su pasión por la vida y las emociones, indestructible ante el desencanto, domador de desengaños, burlador de iras, zancadillas y contratiempos. Las piedras en el camino le han hecho alcanzar el grado de conquistador del éxito íntimo y maestro del gran telar de los sentimientos. En su casa se han tejido sinfín de relaciones, de conversaciones que rompen el alba y van más allá.
Ginés dibuja con la palabra mundos que abren, a su vez, la cartografía del placer y de la dicha. Con sus pinceles se llenan de color las telas y las tablas, las voces y las almas de quienes se acercan a conocer sin intermediarios a este autor escondido y raro. Sí, raro… porque comienza entregando y dándose, sabedor por experiencia que del ansia de aprender se llena el manantial de su imaginación. Comparte y crece, entrega y recibe. Mientras sus envidiosos de toda la vida ven pasar a la musas y se llenan de cansancio, de su desapego a la fama brotan infinidad de ideas, como yemas tiernas que llaman al espacio para seguir creciendo.
Resucita Loto es una pieza que Ginés me leyó por primera vez a mediados de los años 80. A trozos, por fragmentos, como un puzzle que busca sus propias piezas fue construyendo un relato animado, un guión que da testimonio de la fuerza y el optimismo por encima del dolor. Es muy fácil quedarse agarrado a la frustración y la desdicha. La tragedia ha tenido y sigue teniendo sus devotos. Parece que el corifeo del dolor siempre tiene sus acólitos y seguidores, prestos a llenarse de lágrimas… Pero aquí no es así. La apuesta es Resucita. Es un canto al paso siguiente, al siguiente peldaño… al día después del tormento, cuando la calma se hace consciente y reclama de nuevo el horizonte. “Resucita Loto”, es un relato que da testimonio del optimismo por encima de la destrucción. Como dice Ginés, justo antes de terminar, “no procede instalarse en el pedestal de la catástrofe”. Y esto es mucho decir.
Chaime Marcuello Servós
Julio de 2011
